La silla elevadora para el coche

A partir de los 15 kilos tu hijo ya puede viajar en automóvil sentado en un elevador con respaldo. Recuerda que deberá utilizarlo hasta los 12 años, más o menos, y que lo más importante es que el cinturón de seguridad del coche se ajuste perfectamente al niño.

Según la normativa de la Dirección General de Tráfico, hasta los 36 kilos y los 135 centímetros, los niños deben viajar sentados en sillas adecuadas a su seguridad, con arnés y reposacabezas. Las sillas de seguridad se clasifican en grupos, y cada grupo corresponde a un tramo de peso, desde el grupo 0 y hasta el 3, desde el bebé recién nacido hasta los 12 años. Los elevadores son la opción más segura para los niños que superan los 15 kilos, es decir a partir del grupo 2. Existen diferentes tipos según el peso del niño.

Grupo 2: elevadores con respaldo

Los niños que pesan entre 15 y 25 kilos corresponden al grupo 2. La DGT les obliga al uso de las sillas elevadores con respaldo, con las que el pequeño puede utilizar el cinturón de seguridad del vehículo.

Grupo 3: elevadores sin respaldo

Las sillas del grupo 3 son cojines elevadores sin respaldo. Se utilizan con el cinturón de seguridad del coche y son perfectos para los niños mayores, entre 22 y 36 kilos, es decir de los 6 a los 12 años.

Muchos elevadores con respaldo ofrecen la posibilidad de desmontar este último cuando el niño supere los 25 kilos: son elevadores en los que se combina el grupo 2 y el 3. También hay sillas que cubren todas las necesidades desde que el niño nace hasta que se hace mayor. Estas sillas engloban los grupos desde 0 a 3 o de 1 a 3. Tú debebes decidir, en función de vuestras necesidades, si prefieres elegir una silla específica para cada fase o una que se pueda adaptar a cada etapa de tu hijo.

sillas elevadoras

A la hora de comprar el elevador:

  • Fíjate en el asiento: ha de ser ancho y lo suficientemente profundo.
  • Tiene que llevar apoyabrazos acolchados.
  • Con protectores laterales reforzados.
  • El elevador ideal es aquel que cuenta con un cabezal ergonómico profundo, de altura regulable.
  • Si el respaldo es reclinable el niño estará mucho más cómodo.
  • Con una funda acolchada extraíble que se pueda lavar a máquina
  • Observa si tiene aperturas para la fijación del cinturón de seguridad: evitarán que el cinturón del coche pase por el cuello del niño.

El elevador perfecto es el que permite al niño sentarse apoyando toda su espalda contra el respaldo del asiento del vehículo, doblar las piernas con comodidad y mantener esa posición sin deslizarse hacia abajo.

El elevador y el cinturón de seguridad

Antes de estrenar el elevador, comprueba que al sentar a tu hijo, el cinturón de seguridad le queda perfecto. Si no es así, devuélvelo: algo falla.

El ajuste correcto del cinturón de seguridad se consigue cuando la parte superior pasa por encima de la clavícula y del esternón del niño, y queda a medio camino entre el hombro y el cuello y nunca cerca del cuello. Además, la parte inferior se tiene que apoyar en la parte superior de los huesos de las caderas, por debajo del abdomen. Si el cinturón pasa por encima del cuello, o por encima del estómago, puede ser peligroso.

Ten en cuenta, además, que la cabeza del niño debe quedar protegida por el reposacabezas del vehículo: si le queda demasiado alto, o el asiento del vehículo carece de él, tu hijo debe viajar en un elevador con reposacabezas.