Lo que debes tener en cuenta a la hora de elegir un teléfono móvil
Enrique Rodal
Periodista especializado en tecnología
www.enriquerodal.com
Enrique forma parte del equipo de expertos que cada día
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Adquirir un teléfono móvil no es una cuestión tan sencilla como puede parecer a simple vista. Encontrar la propuesta más adecuada teniendo en cuenta nuestro presupuesto, las prestaciones del ‘smartphone’, nuestras necesidad y la sencillez en el proceso de compra son factores a tener en cuenta. Hoy nos vamos a fijar en los aspectos técnicos que debemos valorar a la hora de comprar nuestro nuevo ‘smartphone’.
Lo primero, el software
Una de las primeras decisiones que debemos de tomar antes de comprar un teléfono móvil, y quizás sea la más importante, es la del sistema operativo por el que apostaremos. Apple con el iOS para iPhone, Google con Android y Microsoft con Windows Phone han mostrado sus ventajas e inconvenientes y esta cuestión es fruto de largos debates.
Los usuarios de iPhone lo defienden por ser el más seguro y fiable; los detractores lo atacan por tratarse de un sistema operativo privativo y porque la mayoría de apps son de pago. En el caso de Google, una de sus ventajas es la gran cantidad de modelos disponibles de decenas de fabricantes de todo el mundo y la posibilidad de acceder a los ‘entresijos’ de Android. En el lado negativo hay que mencionar problemas de seguridad en algunas de sus apps.
Windows Phone se reconoce por ser un sistema fiable y su integración con otros dispositivos con Windows, aunque la balanza se descompensa por las pocas aplicaciones (comparadas con Android e iOS) disponibles.
A tener en cuenta: además de los tres habituales, existen marcas que llevan instalados otros sistemas operativos, como Blackberry OS, Firefox OS, Ubuntu for Phones, Bada, Tizen o Symbian.
Como en el caso de Windows Phone, el principal problema de los sistemas minoritarios suele ser que la cantidad de aplicaciones disponibles es escasa, lo que es una gran desventaja aunque el móvil sea rápido, seguro y barato.
Un ‘smartphone’ cómodo y rápido
El tamaño del teléfono también es un aspecto importante. Está claro que cuanto más grande sea la pantalla mejor vamos a poder disfrutar de vídeos y contenidos en internet, pero hay que tener en cuenta también la ergonomía, la facilidad de manejo con una sola mano, e incluso la comodidad para llevarlo en el bolsillo.
El ‘hardware’ es un aspecto destacado que puede marcar la diferencia entre una experiencia frustrante y otra completamente satisfactoria. Nuestra elección debe de estar vinculada al uso que demos a nuestro móvil. Si vamos a pasar horas en internet, a descargar aplicaciones y a ver algún vídeo de vez en cuando tenemos que empezar a pensar en, al menos, un teléfono con procesador de cuatro núcleos (quad-core). Los hay de hasta ocho (octa-core) aunque los precios se disparan.
A tener en cuenta: 2 Gigas de memoria RAM es el mínimo para que el ‘smartphone’ pueda gestionar cómodamente los diferentes procesos. Respecto a la memoria de almacenamiento, aunque muchos teléfonos incluyen la posibilidad de ampliación mediante tarjetas MicroSD, lo cierto es que el acceso directo a la memoria física del móvil nos evitará muchos problemas y ralentizaciones.
También debemos tener en cuenta que, según la versión de sistema operativo Android que tengamos, disponer de espacio extra mediante MicroSD puede servirnos solo para almacenar en él archivos multimedia.
La cámara, cada vez más importante
La cámara de fotos del ‘smartphone’ es otro aspecto complicado de seleccionar, ya que a veces los números son engañosos y puede haber grandes diferencias entre distintos móviles con cámara, por ejemplo, de 13 megas de resolución. La calidad de la imagen depende de la lente, el sensor, el procesador, si los píxeles son interpolados... Lo mejor es ver y comparar, porque el que más tiene no tiene porque ser el mejor.
A tener en cuenta: la cámara secundaria cada vez tiene más tirón debido a la moda de los selfies.
Otros aspectos en los que también te deberás de fijar son la capacidad de la batería medida en mAh, el tipo de conexión WiFi (la mejor es la a/b/g/n y si tiene doble antena, mejor), si es compatible con LTE 4G, los materiales de acabado, la resolución de pantalla, la resistencia de la pantalla (Gorila Glass), las tecnologías inalámbricas (NFC, Bluetooth), los diferentes tipos de sensores o medidores de parámetros biométricos, la versión del sistema operativo y las posibles actualizaciones.
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