Preparados, listos… ¡al cole!

Sara Tarrés

Psicóloga y autora del blog www.mamapsicologainfantil.com

Sara forma parte del equipo de expertos que cada día

nos ofrecen los mejores consejos en Carrefour.es

De los juegos en la piscina a los deberes en el pupitre. Después del verano, los niños cambian sus actividades de ocio por una rutina más rígida y seria. Te ofrecemos los trucos para ayudarles en la transición de la playa al colegio.

En la rutina está la clave

Una semana antes de que los niños empiecen el colegio es hora de reajustar los horarios para adaptarlos a los que van a tener durante el curso. Seguimos de vacaciones, pero debemos acostar y levantar a los niños a la hora a la que lo haremos cuando vayan al cole, aunque tenemos margen para conseguirlo de manera progresiva.

Es importante también seguir en casa el mismo horario para las comidas que funcionará en el centro y establecer un tiempo máximo para cada una. Durante el verano tendemos a relajarnos en este aspecto: las comidas son más desordenadas e incluso abandonamos ciertos patrones saludables que conviene recuperar también durante los días previos al inicio de curso.

A tener en cuenta: Para motivar a tu hijo ante la vuelta al cole, puedes proponerle comenzar una nueva actividad extraescolar que le haga ilusión.

Entre los seis y los ocho años los niños necesitan de once a doce horas de sueño. Entre los diez y los doce, diez horas sería lo ideal. Entre semana tienen que acostarse temprano para poder descansar.

La ilusión de estrenar el material

Una manera de aumentar las ganas de los niños de volver al cole es preparar con ellos el nuevo material escolar que utilizarán durante el curso. Lo ideal es que nos acompañen a comprar los libros de texto, los cuadernos, la mochila o el uniforme. Es una manera muy divertida de acercarse progresivamente a la rutina escolar.

La mochila debe ser ergonómica para que no dañe su espalda. Procura que el tamaño permita guardar todas las cosas que va a necesitar en un día de clase, pero que no supere su torso. Las mochilas más cómodas son las que tienen el respaldo acolchado.

Echar un vistazo a los libros antes de que comiencen las clases les dará seguridad. No se trata de que vayan al cole con la lección aprendida, pero sí conviene que el temario que va a tratarse durante el año les resulte familiar.

A tener en cuenta: Permite que tu hijo tenga varios estuches para mantener el orden. Uno para los lápices, otro para los rotuladores, otro para material de manualidades…

Siempre hay que remitirse a la lista de material que proporciona el centro, pero si algún objeto de papelería les hace especial ilusión, no se lo niegues. Es una forma de motivarles.

Habla y escucha

Es lógico que los niños se muestren nerviosos los días previos al comienzo de las clases. Por eso es muy importante que prestes atención a sus sentimientos. Para reducir la ansiedad, se debe permitir que el niño exponga sus temores. Los padres tratarán de resolver todas sus dudas y mantener un punto de vista positivo, resaltando las cosas buenas de volver al cole. Es importante anticiparse y explicar qué va a ocurrir durante los primeros días de clase, repasar los horarios y transmitirles tranquilidad.

A tener en cuenta: Algunos niños y adolescentes pueden experimentar, de forma pasajera, dolores abdominales, náuseas o cefaleas por el estrés de la vuelta al cole.