Saca el mayor partido al sonido de tu ‘Smart TV’
La calidad de imagen de una televisión de última tecnología ha de completarse con sistemas adicionales de sonido para lograr una experiencia cinematográfica tanto visual como sonora.
Altavoces
Debido a que cada vez los televisores tienen menos grosor, los altavoces incorporados no suelen tener la potencia y calidad, sobre todo de graves, necesaria para obtener una gran experiencia de sonido en películas, series y videojuegos. Por eso, es necesario complementarlos con buen sistema de sonido que supla esas carencias si queremos una experiencia similar a la del cine en nuestro salón aprovechando todas las posibilidades que ofrecen las ‘Smart TV’.
Si queremos que dicha experiencia cinematográfica se parezca lo máximo posible a lo que nos ofrecen las salas comerciales de cine, la solución más indicada es un conjunto de receptor/amplificador de audio, altavoces y ‘subwoofer’ conocido como ‘home cinema’. Para obtener el preciado sonido envolvente, son necesarios al menos cinco altavoces y un ‘subwoofer’. Los tres altavoces delanteros y los dos traseros irían conectados a nuestro receptor AV. Y este, a todas las fuentes de audio y vídeo de las que queramos disfrutar, ya sean reproductores de Blu-Ray, DVD, videoconsolas, así como la propia TV si sintonizamos contenidos emitidos en 5.1. Es lo que se conoce como ‘home cinema’.
También podemos superar el estándar 5.1 y optar por 7.1 o incluso 9.1, dependiendo del tamaño de la sala y de su insonorización acústica para no molestar a los vecinos. Es importante que el receptor AV disponga de la calidad y las conexiones necesarias para todos nuestros aparatos y nuestros altavoces.
Los últimos modelos de televisores también traen de serie conexiones inalámbricas para los altavoces traseros, para evitar tener que esconder el cable, y conexiones WiFi para la reproducción de contenidos desde nuestros dispositivos móviles y ordenadores domésticos.
Barras de sonido
Para salones más reducidos, existe también la opción de complementar el sonido de nuestra TV con una barra de sonido acompañada de un ‘subwoofer’. Suele ser una opción más asequible económicamente que la anterior y también una solución más cómoda. No necesita instalación de altavoces en las paredes, pues solo consta de una barra que se suele colocar debajo del televisor y un ‘subwoofer’ para los sonidos graves que se coloca también cerca o en la misma mesa. Se obtiene así un sistema de audio 2.1 o, según los modelos, 4.1 o 5.1. Incluso se logra una simulación de sonido envolvente mediante la técnica de proyección del sonido, que engaña a nuestro cerebro sobre la procedencia del mismo. Estas barras suelen tener las conexiones necesarias para conectar nuestra TV y alguna otra fuente externa, pero no ofrecen el juego que nos puede dar un receptor AV en ese aspecto.
Configuración del sistema
Los más importantes es que nuestro sistema de sonido sea capaz de descodificar las últimas tecnologías de audio utilizadas en las últimas superproducciones de cine, como Dolby TrueHD o DTS-HD. Además, hay que tener en cuenta la colocación de los altavoces en la habitación para que el ‘rebote’ del sonido en las paredes no afecte de diferente manera a uno de los lados. Los receptores AV son capaces de corregir estas variaciones de posición y de altura de los altavoces mediante sencillos menús de configuración. Vale la pena dedicar un rato a configurar bien el sistema de sonido para que la experiencia sea lo más fiel posible a la original.
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