Tipos y características de las sillas de paseo
A los seis meses tu bebé ya puede salir en una sillita de paseo. Estará feliz porque lo ve todo mucho mejor, y tú ganas en comodidad: son más fáciles de plegar, más ligeras y manejables, con sistemas de seguridad a prueba de niños y la posibilidad de acoplar mil accesorios.
Seguridad
Las sillitas de paseo deben cumplir la norma europea EN 1888:2003 y las tres enmiendas de 2005, que garantiza la seguridad del bebé en cuanto a materiales, tejidos y cinturones de la sillita. Además, tiene que funcionar durante 100 kilómetros, a una velocidad de 5 km/h, con un peso de entre nueve y 15 kilos y una carga extra de dos kilos, sin presentar daños.
Sólo sabrás si es cómoda y manejable si sientas al bebé y te mueves con ella, haces giros y la pliegas. Comprueba lo que pesa y mide, para saber si te cabe en el maletero del coche o en el ascensor de casa. Fíjate en los frenos, si el asa es reversible, si lleva cesta y si se le puede acoplar la sombrilla, el plástico de la lluvia o el saco en el invierno.
La silla ideal
- Con un asiento abatible y seguro, que sea rígido o semirrígido, para ofrecer el apoyo suficiente a la espalda del niño. La tapicería debe ser transpirable y lavable.
- Que se adapte a su crecimiento: la usará desde los seis meses hasta al menos los dos años, cuando camine con seguridad.
- Que lleve apoyabrazos y reposapiés, y por supuesto correas o arneses de seguridad.
- Que sea manejable, cómoda y fácil de plegar.
- Que el sistema de frenado sea seguro y no lo pueda manipular el niño.
- Con el manillar regulable en altura y un chasis resistente, pero ligero.
Las sillas deportivas: para excursionistas
Sus frenos son de disco y se accionan desde el manillar. Las ruedas son súper grandes, con un dibujo para agarrarse bien a las superficies abruptas y provistas de amortiguación para absorber los golpes. Las sillas todoterreno son perfectas si vives en el campo o en la playa, o si sales mucho de excursión.
Algunos modelos tienen tres ruedas, en lugar de cuatro: la estabilidad es la misma, pero giran y superan los obstáculos más fácilmente. Otras llevan ruedas hinchables y otras, extraíbles. Estas sillas son las más grandes y pesadas.
Las sillas gemelares: para los hermanitos
Si tienes gemelos o hermanos que se lleven pocos meses de diferencia, puedes optar por una silla de paseo gemelar, que incorpora dos sillas en una ofreciendo comodidad a los niños y practicidad a los padres.
Las sillas paraguas: la reina de la ciudad
Las sillas paraguas ocupan muy poco espacio, pesan menos de cinco kilos y se manejan con facilidad. Se recomiendan para niños a partir de un año, porque son menos confortables. Resultan perfectas para los transportes públicos y el maletero del coche. El freno se bloquea con un pequeño pedal individual para cada rueda trasera. Las ruedas son pequeñas, perfectas para los terrenos lisos y regulares, como las aceras de la ciudad.
Las sillas con cierre de libro: tipo trío
La sillas tipo libro suelen pesar más de 10 kilos. Son muy cómodas, indicadas a partir de los seis meses, tienen ruedas grandes, un manillar amplio y una cesta debajo para llevar juguetes, la compra o tu abrigo.
Al presionar con el pie sobre una barra se bloquean las dos ruedas traseras a la vez. Sus ruedas son grandes, las delanteras son dobles e individuales y las traseras individuales. Suben y bajan las aceras con poco esfuerzo.
TODAS LAS SILLAS DE PASEO
Si te ha interesado este artículo te recomendamos: